Tal vez hemos escuchado acerca de la paternidad responsable, esta es el involucramiento activo del padre, es su rol no solamente como proveedor sino en la crianza y el día a día de sus hijos.
Como pediatra estoy convencida que la paternidad responsable es fundamental, nos habla de padres que están junto a su familia en todos los procesos de sus hijos, asumiendo de forma innata el cuidado de ellos.
Esto también es responsabilidad de él y dejando atrás el pensamiento que la crianza de los bebés es una actividad exclusiva de mamá.
¿Cómo debe ser la paternidad responsable?
La paternidad responsable nos habla de la creación del vínculo en la crianza y la distribución equitativa de las tareas entre el padre y la madre.
Esto no solo propicia un correcto desarrollo biológico y psicosocial de los niños, sino que también impacta al desarrollo de todo el hogar.
Si los padres dividen las responsabilidades, será más fácil realizar actividades que generen bienestar, felicidad y sobre todo tranquilidad para todos.
Por ejemplo, mientras papá cuida al bebé, o hace tareas propias del hogar, mamá puede descansar de su ardua labor de la lactancia o realizar actividades que generalmente quedan pendientes en esos primeros meses de vida de los bebés que implican un proceso importante de adaptación, todo eso va a redundar en relaciones sanas, basadas en la admiración y respeto.
La responsabilidad económica es fundamental, pero no suficiente, un padre presente en todo lo que implica al cuidado y crianza de los hijos, marcará la diferencia.
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¿Qué aporta la paternidad responsable?
El padre que está presente en la crianza de sus hijos, sin duda alguna y con total naturalidad, entregará el afecto necesario, enseñará valores y compartirá tiempo de calidad con sus hijos.
Se trata de mostrar afecto y esto va más allá de lo material, significa pasar tiempo con los hijos, conocerlos, formar lazos, actividades e incluso un lenguaje especial.
La paternidad responsable también es hacerlos crecer en un ambiente seguro y amoroso, creando la base para la formación de seres respetuosos con su entorno.
Esta estrecha relación que se forma a partir del compartir y la confianza, permite que se pueda enseñar disciplina basada en confianza, recordando la importancia del ejemplo en cada acto de la vida diaria.
Paternidad responsable, un padre activo
Ser un padre activo y cuidar de tus hijos es:
- Estar presente desde el embarazo, conocer cada cosa que pasa durante la gestación hace que valores cada momento del milagro de la vida y así tejer vínculos muy fuertes
- Mantener una relación afectuosa con tus hijos
- Participar del cuidado diario y la crianza (dar de comer, hacer el baño, peinar, vestir, participar de la rutina del sueño)
- Compartir con mamá las tareas de la crianza y del hogar
- Dar una crianza respetuosa
La presencia activa del papá marca una diferencia en el desarrollo de los niños y en diferentes áreas.
Los niños que cuentan con un papá presente, que asume la paternidad de forma responsable, tienen mejor autoestima, más habilidades sociales, capacidades para enfrentar desafíos.
De igual forma cuentan con mayor bienestar psicológico y sin duda, verán un ejemplo que seguirán e imitarán.
Si necesitan una asesoría como familia para empoderarse aún más de la paternidad responsable, saben que cuentan conmigo ¡Podemos conversar!